Esther de Frutos

Titulada en Diseño de moda, Patronaje, Corte, Confeccion y Prueba de modistería por el Instituto Internacional FELI de Barcelona, en 1995, me convertí en Técnico superior de Patronaje y Moda en 2016. Siempre hay que actualizarse y seguir aprendiendo.

Me llamo Esther y soy diseñadora por vocación desde que tengo uso de razón.

Durante mi infancia contacté con el arte del vestir a través de mi madre, modista que trabajó, hasta que yo nací, en el taller de alta costura de Pedro Rodriguez en su tercer salón, de la calle de Alcalá, en Madrid. También recuerdo a mi padre hablando de los tejidos que vendía en “unos grandes almacenes “ de la calle Preciados. Él me enseñó a coger unas tijeras de corte. Me faltó aprender el ganchillo que una prima de mi abuela hacía repetidamente sin mirar, en el piso de abajo. También me fascinaba, el nido de abeja que hacía la madre de una compañera del colegio. Me quedaba embobada mirando cómo el hilo envolvía la aguja una y otra vez, para adornarlo con pequeñas flores.

Como hija obediente estudié hasta COU con su selectividad, pero mi afición por el dibujo y los conocimientos de costura adquiridos en mi casa me animaron a iniciar mis estudios de Diseño de Moda y patronaje durante cuatro años. Un periodo de aprendizaje y de descubrimientos apasionantes, que llenaron mi década de los 20. De aquella época recuerdo los desfiles en Salamanca, Leon, Burgos y Valladolid.

Después de unos años de paréntesis, para formar mi propia familia, decidí seguir mi corazón y dedicar una parcela de mi vida a mi pasión. Puse mi cabeza y por ende mis manos a trabajar en un área, que no esperaba, con una rica historia y una presencia notable, aunque en desuso en el mundo de la moda actual : el arte de la sombrerería.
Soy una diseñadora de moda de los años 90, y en la primera década del siglo XXI, de manera autodidacta e investigando aquí y allá, decidí comenzar el proyecto de Canotier tocados exclusivos con gran entusiasmo.

Como hija obediente estudié hasta COU con su selectividad, pero mi afición por el dibujo y los conocimientos de costura adquiridos en mi casa me animaron a iniciar mis estudios de Diseño de Moda y patronaje durante cuatro años. Un periodo de aprendizaje y de descubrimientos apasionantes, que llenaron mi década de los 20. De aquella época recuerdo los desfiles en Salamanca, Leon, Burgos y Valladolid.

Después de unos años de paréntesis, para formar mi propia familia, decidí seguir mi corazón y dedicar una parcela de mi vida a mi pasión. Puse mi cabeza y por ende mis manos a trabajar en un área, que no esperaba, con una rica historia y una presencia notable, aunque en desuso en el mundo de la moda actual : el arte de la sombrerería.
Soy una diseñadora de moda de los años 90, y en la primera década del siglo XXI, de manera autodidacta e investigando aquí y allá, decidí comenzar el proyecto de Canotier tocados exclusivos con gran entusiasmo.

Realizo tocados de forma artesanal, cosidos delicadamente con puntadas primorosas, para cualquier acontecimiento en el que quieras destacar de forma especial o complementar a ese vestido ideal que también te diseñamos y confeccionamos a medida. Los materiales que utilizo son principalmente, plumas naturales, rafias, sinamay, cristales bordados, pailletes… y diversos tejidos de primera calidad con los mejores proveedores del ámbito nacional como sedas, organzas, brocados que imprimen distinción a tu imagen. Creaciones especiales porque son piezas únicas, de lineas diversas, pero manteniendo el estilo de Canotier.

Actualmente compagino el diseño, patronaje y confección de Canotier Costura y Canotier Tocados con la docencia en E+E estudio de diseño y creación que inauguré en 2021 en Valladolid.

Mis proyectos